Automatiza, personaliza y optimiza la experiencia de compra con inteligencia artificial.
La IA analiza el historial del cliente para ofrecer recomendaciones personalizadas en tiempo real.
Ejemplo: Recomendar productos de skincare basados en compras anteriores.
Chatbots responden consultas, recomiendan productos y gestionan devoluciones.
Ejemplo: Informar estado de pedidos o sugerir artículos similares.
Predice demanda y evita quiebres o excesos de stock en tiendas físicas y online.
Ejemplo: Sugerir transferencias entre sucursales según demanda local.
La IA modifica precios en tiempo real según la demanda, competencia y disponibilidad.
Ejemplo: Subir precio de un producto con alta demanda y poco stock.
Genera órdenes de compra automáticas al detectar niveles críticos de stock.
Ejemplo: Reponer productos sin intervención manual.
Identifica productos que se compran juntos para promociones y combos.
Ejemplo: Sugerir papel fotográfico al vender tinta.
Permite buscar productos por imagen o identificar faltantes en góndolas.
Ejemplo: Subir una foto para encontrar productos similares.
Agrupa clientes por valor, hábitos o frecuencia para campañas más efectivas.
Ejemplo: Ofertas premium para compradores frecuentes.